Las distintas opciones terapéuticas empleadas actualmente para el manejo de la HBP, podrían resumirse en la siguiente tabla:
- Vigilancia activa
- Tratamiento farmacológico:
- Alfabloqueantes
- Inhibidores de la 5 alfa reductasa
- Fitoterapia
- Simpaticomiméticos/antocolinérgicos
- Inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5
- Tratamiento intervencionistas:
- Prótesis uretrales (en desuso)
- Trigonocervicoprostatotomía (TCP)
- Técnicas que eliminan parcialmente el adenoma prostático:
- Resección Transuretral de Próstata (RTUp)
- Vaporización prostática (habitualmente con láser verde)
- Técnicas que eliminan completamente el adenoma prostático:
- Adenomectomía abierta/ laparoscópica/ robótica.
- Enucleación prostática con láser (habitualmente con láser Holmium= HOLEP).
Aunque se trate de una entidad benigna, la ausencia de tratamiento o seguimiento de la enfermedad pudiera derivar en complicaciones como son la presencia de hematuria, infecciones urinarias de repetición, formación de cálculos vesicales, retención urinaria o insuficiencia renal.
A modo orientativo, en los pacientes con sintomatología leve (IPSS 0-7) suelen aconsejarse medidas higiénico-dietéticas (cese de estimulantes como el tabaco/ alcohol o reducción del consumo hídrico a partir de las 20h) y en aquellos pacientes con sintomatología moderada (IPSS 8-19 ) o severa (IPSS 20-35) podría optarse por un tratamiento médico o quirúrgico.
A la hora de plantear cual será la mejor estrategia terapéutica deberán tenerse en cuenta factores como el tamaño prostático, tipo-severidad de síntomas y expectativas del paciente.
En lo referente a la cirugía, clásicamente se ha aceptado para el tratamiento de próstatas de escaso volumen (<80 cc) el tratamiento endoscópico mediante Resección Trasuretral de Próstata(RTUp) y para el tratamiento de próstata grandes (> 80 cc) la cirugía abierta (adenomectomía abierta). Gracias a la evolución tecnológica, han podido desarrollarse técnicas como la enucleación prostática con láser de Holmium (HOLEP) y la Adenomectomía robótica, procedimientos más precisos que permiten un mejor control del sangrado, disminuyendo así drásticamente el tiempo de ingreso hospitalario o el tiempo de permanencia de sonda urinaria.
La Técnica HOLEP es un procedimiento endoscópico (a través de la uretra) mínimamente invasivo que no precisa de incisión abdominal.
Mediante un flujo constante de suero salino se permite visualizar adecuadamente el plano quirúrgico, consiguiendo separar completamente el adenoma de la cápsula prostática, depositándolo posteriormente en el interior de la vejiga. Este plano se desarrolla gracias al empleo del láser de Holmium. La coagulación se limitan a 3-4 mm, lo que es suficiente para obtener una hemostasia adecuada con una gran precisión.3 Una vez que el adenoma está localizado en la vejiga se procede a la morcelación (aspirado y fragmentación) del mismo consiguiendo así una eliminación completa del adenoma obstructivo.
La enucleación prostática robótica consigue este mismo objetivo mediante el empleo del “Robot Da Vinci” tecnología de última generación que accede a la próstata a través del abdomen mediante 5 pequeñas incisiones de 8 mm y que aporta una excelente visión en 3D ampliada que permite al cirujano aumentar su precisión quirúrgica y posibilidad de control vascular. Esta técnica lleva realizándose desde e el año 2008 y su seguridad y eficiencia están respaldadas por la evidencia científica actual, postulándose como una alternativa mínimamente invasiva que reduce el sangrado, estancia hospitalaria y tiempo de sonda en pacientes con próstatas de gran volumen.
Con el acceso endoscópico mediante RTUp, que realiza una resección parcial de la glándula, se obtiene una excelente mejoría clínica inicial (beneficio en calidad de vida del 77%) pero un 14.7% de los pacientes operados mediante este procedimiento precisarán de nueva intervención debido a la reaparición de los síntomas miccionales obstructivos. Las nuevas alternativas quirúrgicas mínimamente invasivas (HOLEP o Adenomectomía prostática robótica) se centran en la eliminación completa del adenoma prostático para evitar esa tasa de retratamiento.
La Adenomectomía abierta es el abordaje quirúrgico más antiguo para el tratamiento de los de la HBP estando indicada en glándulas sustancialmente agrandadas de volumen. Tal y como ocurre con el acceso endoscópico (RTUp) proporciona una excelente mejoría clínica inicial (incremento en calidad de vida del 60-87%) pero dado que es un procedimiento que precisa de una amplia incisión abdominal para poder extraer el adenoma, la tasa de complicaciones no es despreciable destacando el riesgo de hemorragias severas (7.5%), infecciones urinarias (5.1%) o sangrados incontrolables que requieren reintervención (3.7%).8 En este sentido técnicas modernas como HOLEP o Adenomectomía robótica al no requerir de una incisión abdominal amplia, disminuyen drásticamente la necesidad de analgésicos o la posibilidad de infecciones en herida quirúrgica.
HOLEP consigue una eliminación completa del adenoma prostático pudiendo abarcar próstatas de pequeñas o grandes dimensiones, manteniendo las ventajas de la cirugía mínimamente invasiva:
- menor dolor.
- menor estancia hospitalaria.
- menor tiempo de sonda.
- menor posibilidad de hemorragia.
Otra de las ventajas de la técnica HOLEP es la posibilidad del tratamiento de cálculos o tumores vesicales durante en el mismo acto quirúrgico prostático.
Estos resultados han sido reproducidos en estudios a largo plazo, destacando que no se ha objetivado repercusión sobre la función eréctil de los pacientes.
Su favorable perfil de seguridad permite emplear la técnica incluso en pacientes antiagregados o anticoagulados.
Por todos estos motivos HOLEP es considerada como la única técnica endoscópica que dispone de un grado de recomendación fuerte , por parte de la Asociación Europea de Urología, para el tratamiento de la HBP.
A pesar de todas las ventajas expuestas para este procedimiento, la técnica HOLEP únicamente debe realizarse por cirujanos experimentados, dado que para conseguir los estándares de calidad como son: ausencia de incontinencia postoperatoria, reintervención por sangrado o reestenosis, debe contarse con una amplia experiencia quirúrgica.Siendo destacable que la mitad de los centros que inician la técnica HOLEP, abandonen el procedimiento por dificultad en el proceso de aprendizaje, lo cual hace recomendable realizar esta técnica únicamente en centros con experiencia acumulada.
En SUTURO contamos con cirujanos con reconocimiento y prestigio en técnica HOLEP y Adenomectomía robótica, avalados con una experiencia acumulada de > 100 casos/año y una tasa de retratamiento inferior al 3 %. Nuestros resultados nos han convertido en uno de los Centro de Referencia para el tratamiento de la Hiperlapsia Benigna de Próstata mediante técnicas mínimamente invasivas.